Tras el colapso del vuelo 447 de Air France en 2009, se debatió acerca de hacer de ACARS una "caja negra en línea" para reducir los efectos de la pérdida de un registrador de vuelo. Sin embargo, no se realizaron cambios en el sistema ACARS.
En marzo de 2014, los mensajes de ACARS y el análisis Doppler de los datos de comunicación por satélite de ACARS desempeñaron un papel muy importante en los esfuerzos para localizar el vuelo 370 de Malaysia Airlines en una ubicación aproximada. Mientras que el sistema primario ACARS a bordo del MH370 se había apagado, un segundo sistema ACARS llamado Classic Aero estaba activo mientras el avión estaba encendido, y seguía tratando de establecer una conexión con un satélite Inmarsat cada hora.
El ACARS en el Airbus A320 del vuelo EgyptAir 804 informó de "irregularidades" al personal de tierra en tres ocasiones distintas, lo que provocó tres aterrizajes de emergencia, en las 24 horas previas al accidente del avión en el mar Mediterráneo el 19 de mayo de 2016, que mató las 66 personas a bordo. No se explicó la naturaleza específica de las irregularidades, pero en cada caso el avión recibió autorización para continuar su vuelo.
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